¡Te enseñamos a hacer una matriz IPER!

¿Has visto Destino final o Mil maneras de morir? Si quieres aprender a hacer una matriz IPER, cuyas siglas significan identificación de peligros y evaluación de riesgos, te pediremos que te pongas en modo película fatalista por un rato para que aprendas a identificar peligros, evaluar riesgos y oportunidades que te permitirán establecer controles de seguridad. Esta herramienta tan útil se aplica cuando deseamos implementar la norma ISO 45001:2018 – Sistema de gestión de seguridad y salud en el trabajo (SGSST).

Si no deseamos poner en marcha un SGSST, pero queremos incrementar el bienestar de los trabajadores, también es posible servirse de esta matriz tan útil, puesto que ella nos ayuda a que nuestro sitio de trabajo pueda contar con instalaciones más seguras, capaces de brindar la protección necesaria para evitar accidentes, incidentes y enfermedades relacionadas con el trabajo.

¿Cómo hacerla? Te lo explicamos en 7 pasos:

Paso 1: Identifica riesgos y peligros de cada proceso organizacional. No minimices ninguno, inclúyelos para que sea posible brindarles el tratamiento pertinente. El personal encargado de las operaciones se encargará de hacer los aportes más relevantes, puesto que conoce su trabajo a profundidad y está al tanto de los detalles.

Paso 2: Crea un diagrama por cada proceso y precisa riesgos. Lo primero es definir cuáles son los procesos de la empresa, cuántas personas participan y establecer qué riesgos y peligros hay en cada área. Parece trillado y hasta obvio, pero la realidad es que en muchas organizaciones desconocen estos aspectos fundamentales.

Para poder cumplir con ese objetivo, ameritas saber las diferencias entre peligro y riesgo. De acuerdo a la norma ISO 45001, un peligro es una fuente, situación o acto con potencial para causar daño humano. El riesgo, por su parte, es la combinación de la probabilidad de que ocurra un evento o exposición peligrosa relacionada con el trabajo y la severidad del daño y/o deterioro de la salud que puede causar el evento o exposición

Paso 3: Calcula la matriz del riesgo con la siguiente escala:

·        Incidencia baja.

·        Incidencia media.

·        Incidencia alta.

·        Incidencia muy alta.

Es muy importante llenar la matriz con información fidedigna, pues de ella dependerá la efectividad de las acciones que se llevarán a cabo.

Paso 4: Establece un control para cada incidencia. Cada riesgo y peligro amerita acciones distintas. De hecho, los peligros requieren ser eliminados para que no existan los riesgos. Si esto no es posible, podemos transferir, mitigar, aceptar o eliminar los riesgos. Una vez más, en este punto, el aporte de los trabajadores es crucial y tiene gran valor.

Paso 5: Aunque te parezca difícil, identifica las oportunidades. Está bien, al principio del texto te pedimos que te pusieras en modo fatalista, pero la matriz IPER también sirve para hallar oportunidades. Por ejemplo, si estar en contacto con un químico resulta potencialmente peligroso, la matriz IPER podría ayudar a que sustituyas esa sustancia por una que no sea dañina y, además, sea más económica.

Paso 6: Revisa esta matriz periódicamente, al menos cada año. En especial si se crean nuevos servicios y/o productos, si ocurren cambios en los procesos y estructura de la organización, ante el ingreso de nuevos trabajadores o cualquier modificación que resulte relevante.

Paso 7: Mejorar la matriz. La mejora continua es una parte fundamental de los sistemas de gestión. Y si no lo implementaremos, podemos mejorar la matriz, al ingresar nuevas oportunidades, peligros, riesgos y aportes.

¡Anímate a crear un entorno laboral más seguro y sano! En Asesorías ISO RCR estamos dispuestos a guiarte en tu cometido. Recuerda que la SST se traduce en trabajadores seguros y contentos y aumento de ganancias.