¿Cuántas veces tu trabajo se ha hecho insoportable porque el computador es lento, la conexión a internet es inestable, las máquinas de la fábrica se han estado dañando y ya quedan muy pocas operativas? Seguro estamos describiendo el día a día de muchas organizaciones. Esta situación molesta, desgastante e incapaz de sacar lo mejor de cada activo, supone ineficiencia en todos los aspectos organizacionales. El resultado de todo esto es predecible: colaboradores estresados, equipos mal aprovechados, riesgos de que el negocio deje de operar y clientes que reciben sus productos/servicios a destiempo y sin cubrir las expectativas. Pero el día a día no tiene por qué transcurrir de manera tal que el trabajo se convierta en un suplicio incapaz de responder a las necesidades de clientes y partes interesadas. La norma ISO 55001 – Sistema de gestión de activos – propone que los activos sean administrados de forma controlada para poder minimizar costos y riesgos y tomar decisiones basadas en hechos.
Si aún no te familiarizas con el término “activos”, te comentamos que la norma ISO 55000 – Gestión de activos – los define como ítems, objetos o entidades que tienen valor real o potencial para una organización. Pueden ser:
Activos físicos: equipamiento, inventario y los inmuebles de la organización.
Activos no físicos: alquileres, marcas, activos digitales, derechos de uso, licencias, derechos de propiedad intelectual, reputación o acuerdos.
Vale la pena gestionar los activos de forma eficaz porque al saber qué activos tenemos, de cuánto tiempo es la vida útil de cada uno y en qué etapa de su ciclo están, podemos conocer qué tratamiento le corresponde a cada cual. De esa forma podemos lograr varios objetivos:
· Mejores resultados financieros.
· Eficacia en la gestión del riesgo.
· Prestación de mejores servicios y productos.
· Cumplir con la responsabilidad social y corporativa.
· Demostrar cumplimiento de regulaciones y requerimientos legales y medioambientales.
· Contar con mejor reputación.
· Apuntar a la sostenibilidad organizacional.
· Dar continuidad al negocio.
· Utilizar la energía y demás recursos de forma eficiente.
· Control efectivo de la producción.
· Cubrir y superar las expectativas de los clientes.
La clave de un sistema de gestión de activos es una adecuada planificación del mantenimiento preventivo, correctivo y predictivo de los activos. Consideramos que esa es una de las grandes conclusiones de la norma ISO 55001. Implementar el estándar de forma adecuada conlleva a la eficiencia operacional y al ahorro de costes, pues la productividad se ve impactada de manera positiva.
Olvídate de los computadores lentos, las máquinas que no sirven y las horas perdidas. ¡Contáctanos! Sabemos lo que los activos de tu organización necesitan. En Asesorías ISO RCR podemos implementar un sistema de gestión de activos, hacerle mantenimiento e impartir cursos sobre este tema. ¡Pregunta por nuestras ofertas!

